El próximo 23 de febrero sale a la calle “Living like a Runaway: a memoir”, la autobiografía de Lita Ford, y la expectación es considerable, ya que la cosa promete de carasho…
Mötley Crüe y sus “trapos sucios” se quedan en mariconaditas al lado de la que fue guitarra solista de las míticas Runaways, allá por la segunda mitad de los ’70, y sus “aventuras”…
Llegó a dejar The Runaways al descubrir que tres de sus cuatro compañeras eran bucaniers, ante el temor de que intentaran hacer “la tijerita” con ella. Al mismo tiempo, cuenta la leyenda que el mismísimo Robert Plant (posiblemente coqueto) le llegó a ofrecer tocar el bajo en Led Zeppelin, en un momento de flaqueza del siempre legend-ario John Paul Jones.
Cuenta la gran Lita que Tony Iommi era impotente, debido a las ingentes cantidades de farlopa que solía degustar, y acostumbraba a decantarse más por zumbarle que por zumbársela. Quién lo iba a decir de Mr Iron Man??? Del titán que inventó el puto heavy metal, con sus dedos “cerisha”……
En resumen, parece que el libro viene a ser una larga lista de miticidades del metal que la colega se zumbó a lo largo de los últimos 40 años, con sus diversas particularidades y anécdotas a tutiplén, para amenizar la lectura al personal. La tipa no dejó títere con cabeza, al parecer…
Pilló ladillas de Dee Dee Ramone, acojonó a John Entwhistle al confundirla con una sadomasoquista de pro, propició que Eddie Van Halen tuviera que escaquearse por el ventanuco de un baño, escapando de un ex de ella que los pilló “in fraganti”, se vió envuelta en una orgía, tipo “Calígula”, con Jon Bon Jovi, Richie Sambora y más peña, Nikki Sixx la metió en el jaco (toda una rareza, sin duda…)…
Ni siquiera estoicos caballeros como Ritchie Blackmore o Glenn Tipton se resistieron a los encantos de la buena de Lita; que, cuan fogosa depredadora sexual, se los zumbó a todos sin despeinarse la troba (cardada, probablemente, en muchas de las ocasiones)……
Prensa rosa del metal en toda regla, que un servidor está deseando tener pronto entre sus m-anos, devorar con avidez y enterarse de los percales íntimos de todas las celebrities del metal que la colega Lita se pasó por la piedra…
Grande, Lita!
Stay Pelletier