
Odiados y queridos, enjuiciados, juzgados por su vanagloria y engreimiento desmedido, azotados en críticas sin fin por su dilatada y poco comprendida longevidad como banda, desdeñados por su amor a lo material pero, sobre todo, hijos predilectos del Thrash. Idolatrados, amados por sus álbumes Master of Puppets, Ride The Lightning y Black Álbum (en este último caso por otro tipo de seguidores); genios en un mundo de orcos, ladrones en el de los hobbits o algo tan ambiguo como los Jedis de las últimas películas de la saga Star Wars… Sea como fuere, todos hemos escuchado y admirado a METALLICA en algún momento de nuestra existencia.
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