El pasado martes 11 de octubre, víspera de festivo, la ciudad compostelana tenía una cita ineludible con una de las figuras más importantes del rock en la década de los 80, JOE LYNN TURNER, ex-cantante de grupos como Rainbow, Yngwie Malmsteen, Brazen Abbot y Deep Purple, entre otros; a parte de poseer una larga carrera en solitario con más de una decena de discos.
La velada comenzaba con la banda de hard rock coruñesa After All, que según los asistentes estuvieron más que cor-rectos; lo que no pude comprobar “in situ” ya que llegaba con el tiempo muy justo a la Sala Capitol.
La inclusión de este grupo, con el que no contaba, me permitió poder disfrutar por completo de la actuación de la banda sueca Dynazty que está en plena gira de presentación de su último trabajo, ‘Titanic Mass’. Dentro de este disco se incluyen canciones como The Human Paradox, primer single con video incluido, The Beast Inside, I Want To Live Forever, Break Into The Wild o Titanic Mass, que pudimos disfrutar en vivo todos los presentes.
El setlist lo completaron The Northern End, la balada This Is My Life, Incarnation, Raise Your Hands y Starligth. Cabe destacar de este directo la prodigiosa voz de su cantante Nils Molin y el magnifico solo de Jonathan Olson, demostrando su virtuosismo con las cuatro cuerdas.
Sin apenas tiempo para pedir una Estrella Galicia (los Pelletiers no lo prueban!!!), sonaban los primeros acordes de Death Alley Driver y el vocalista americ-ano, su ya famoso bisoñé, guantes y chaleco de cuero (el cual le fingaron durante/después del show, al parecer…) y demás atrezzo ochentero, saltaban a escena. El hecho de que los músicos que acompañan a JLT sean los propios Dynazty, más la incorporación de un teclista, hace que la transición entre grupos sea rápida y fluida.
Con el famoso estribillo de I Surrender, arrancaban los primeros coros del hasta entonces frío público, que en un número aproximado de 400 personas (lo que viene siendo media entrada) consiguieron definitivamente animarse con el Perfect Strangers de los Purple.
La primera prueba de fuego llegó con Rising Force. Se albergaban ciertas dudas sobre si el guitarrista Love Magnusson sería capaz de interpretar los temas de su compatriota Yngwie Malmsteen y cumplió a la perfección, demostrando que es un guitarrista muy solvente.
A continuación, llegarían otros dos temas de la época Turner en Rainbow, la magnífica balada Stone Cold, que contribuyó decisivamente a encumbrar a la banda de Blackmore en EE.UU. y Miss Mistreated.
El momento más emotivo del concierto llegó con la dedicatoria a RONNIE JAMES DIOs, justo antes de sonar Man on the Silver Mountain, seguido por el Deja Vu de su etapa Malmsteen y del clásico de Deep Purple, Highway Star.
Tras Long Live Rock’ n’ Roll se despidió de los asistentes para tomarse un descanso más que merecido (esta claro que ya no es un chaval) y volver rejuvenecido al escenario, minutos después, con los tradicionales bises.
A su regreso, lo acompañaba el vocalista de Dynazty, Nils Molin, que fue el encargado de interpretar, de forma magistral, las notas más agudas del Burn, dejando la parte más sencilla a Turner. Este hecho motivó una larga discusión entre este Pelletier y acompañantes, horas más tarde… ¿Por qué cantar una canción que no es tuya, si no vas a llegar a sus notas más altas?.
Spotlight Kid y el tema más famoso y sobrevalorado de los Púrpura, según mi opinión, Smoke on the Water, pusieron punto y final a la actuación.
Para los amantes de Rainbow que no hayan podido asistir al concierto o para los que se quedaron con ganas de seguir escuchando los acordes creados por Ritchie Blackmore y sus secuaces, R.M. Concert Promotions te brinda otra oportunidad el próximo sábado 5 de noviembre, en la Sala Capitol, con Graham Bonnet Band.
Long Live Rock’ n’ Roll &…
Stay Pelletier
@PelletierHorror