Muchas cosas han cambiado, pero hay otras muchas que nunca lo harán: Batman a los superhéroes, la guitarra al Heavy Metal, la Nocilla a los bocadillos, el Resurrection Fest a los festivales y las Route Resurrection a los bolos en salas de mediano formato. He dicho y vuelvo a repetir!!!
El pasado 14 de Diciembre, salía a la luz el cartel del próximo festival galo por excelencia, y para sorpresa de nadie y como viene siendo habitual, es un cartelón, a falta de mejor vocablo para definir tal genialidad Todos los estilos vuelven a estar cubiertos, desde el thrash mas clásico, al black metal vanguardista, pasando por el punk y hardcore.
Quedan tres meses para que se celebre la decimoséptima edición del Hellfest Open Air, uno de los mejores festivales de rock y metal del mundo (al menos para mi es el favorito). Con todas las entradas vendidas, el festival galo, que nos presentaba su cartel hace unos meses, nos fue desvelando el running order de este festival, algo imprescindible para que los asistentes podamos hacer nuestro planning e ir decidiendo que bandas ver , ante los temidos e inevitables solapes.
Más de 14 horas de música al día, seis escenarios principales y dos más en la Hellcity, en los cuales cuatro bandas tocan a la vez. Más de 150 bandas de diferentes estilos y géneros, pero todos englobados en el maravilloso universo del rock, punk y metal. Los dos escenarios de la Hellcity no publican cartel ni horarios, por eso los obviaré en este artículo. Bienvenidos al Hellfest… Todos tenemos nuestras preferencias y gustos particulares, pero personalmente creo que este cartel es imposible que no te guste. Hay de todo y en mucha cantidad…
Varios años han pasado desde que un servidor disponía los bártulos para irse de peregrinación a la fiesta del infierno. Expedición que, año thrash año y sin descanso, saldrá de A Terra Chá hasta las vastas llanuras de Clissôn. Tierras gemelas: el punto de partida y el de acogida… por su orografía, su clima… y su amor por el vino…
Recuerdo mi primera expedición como si fuera ahora. Muchos herm-anos ya sabían lo que era echarse media casa a cuestas y viajar hasta el Val de Moine a probar el Le Vin autóctono, a disfrutar del mejor festival europeo y hacer el mal sin un ápice de vergüenza. No podré olvidar nunca el rayo de luz del sol que se colaba entre las nubes el día de la llegada, justo una jornada antes del comienzo de la fiesta. Ese rayo que parecía haber sido enviado por Ronnie James Dio para mostrarnos el camino del recinto, el camino a la prueba de que todavía hay esperanza… Recuerdo lo sentido y lo vivido, los nervios a flor de piel de la partida, la sangre agolpándose a borbotones en mi cerebro al llegar y ver el paraíso metalero en el que se convierte la pequeña ciudad gala, la sensación de desconexión nada más entrar por la puerta de la catedral, la calma del Kingdom Of Muscadet… Sentimientos y recuerdos grabados en mi corazón “Parasiempre” (Enrique Bunbury dixit).
Esas primeras birras, esos ojos atónitos, la piel erizada a pesar de que el sol caía de lleno sobre mi cabeza, los Faith No More dando un concierto inolvidable. Salud, drogas y rock´n roll en vena. Mucho ha cambiado desde entonces: el recinto se multiplicó al igual que los asistentes, se murió Lemmy, tocaron los Disturbed después de haber cancelado anteriormente, mucha gente se sumó a mis aventuras para comprobar en sus carnes que lo que los embajadores contábamos era tan cierto como que siempre habrá rock y heavy, pase lo que pase y venga lo que venga… Judas presentó su Firepower, las Pirohex sus cuerpos rodeados de ardiente fuego, Rammstein trajo su show industrial, vigilados, de lejos, por el homenaje a Lemmy que fue colocado en la renovada Warzone. Poco queda que no haya cambiado y no hayamos visto.
Los galos gritando “Libére apéro!! ”, rozando una desfachatez solo comparable a la de nuestros ídolos de los ’80 y atronando el E’Leclerc ante nuestros oídos se echan de menos ahora en un festival que, al ir creciendo, se fue llenando de festivaliers extranjeros, dejando menos protagonismo a los “artistas nolopruebistas locales”. A veces, se echan de menos esas épocas… El Kigdom of Muscadet resiste las embestidas del tiempo y vigila, silencioso, que las cosas sigan su curso; ayudándonos a los veteranos a mantener los pies en el suelo cuando nuestras botas pisan sus sombras, después de un día duro.
Incontables huellas que se tatúan en nuestras entrañas. Muchas cosas han cambiado y muchas lo harán en esta nueva edición; la XVII… Aún y así, el Kingdom seguirá y nosotros también; porque no hay nada más grande que la Fiesta del Infierno. Ganas de…
Todos los años hacemos cábalas. Todas las ediciones hablamos del Line Up del Hellfest como si fuera el Santo Grial. Todos los años corren apuestas, como si de una reunión de la alta sociedad inglesa se tratara…
“En la historia del Heavy metal ha habido muchos frontman, frontwomen e incluso alguna cosa rara (léase Marilyn Manson), pero solo los más grandes han conseguido que, después de abandonar la banda que les catapultó, el respetable siguiera mimándoles, queriéndoles e idolatrándoles… Entre ellos y durante más de cuarenta años se encuentra Udo Dirkschneider.”
(Martín Pelletier dixit 6/01/2019)
“Un tanque alemán entra por la Gran Vía… Silencio, cuchicheos, niños corriendo alocadamente, mamás llamándoles detrás de las puertas, tensión, nervios… U.D.O. en Madrid!!!”
La compostelana Sala Capitol lucía hasta la bandera cuando llegamos, en la cálida tarde/noche del viernes 13 de Mayo. Caras conocidas, gente guapa, blonde girls oliendo a perfumes franceses, algún jevocho, los incombustibles Pelletiers… Carne de directo (y de nolopruebismo), vamos…
Incidentes con Axl Rose, música para un sinfín de anuncios y películas, heridas imposibles de curar… Muchas cosas podríamos decir de los Eagles of Death Metal…