El pasado domingo 8 de octubre asistíamos a la compostelana Sala Moon, para ver el directo de los californianos House of Broken Promises, organizado por Black Moon Creep Agency.
El concierto comenzaba con los italianos Monolith. Su stoner con tintes grunge pertenece a una nueva oleada de grupos que están a camino entre ambos estilos. Grupos como Steak, Blondstone, Deville, It Was The Elf, Isaak, Los Disidentes del Sucio Motel o los propios Monolith son solo un ejemplo de esta nueva hornada.
Los de Módena salieron al escenario con ganas de demostrar su calidad, pese a haber muy poco público (menos de media entrada). Un domingo por la noche quizás no sea el mejor día; aunque, personalmente, si vas a ver un buen concierto, te da igual el día que sea.
Presentaban su nuevo LP, “Even More”, el segundo disco de los italianos; que, pese a ser una banda con pocos años de vida, cuentan tambien con un Ep homónimo y un primer disco, llamado “Louder”.
Mi desconocimiento sobre esta banda era absoluto, tanto que muchos de los allí presentes esperábamos a los Monolith alemanes; porque la verdad es que hay unos cuantos grupos llamados así (unos thrashers yankis, el citado grupo de doom aleman y estos italianos).
No había escuchado nada de ellos antes del concierto y me sorprendieron gratamente; sobre todo la voz de Andrea Marzoli, así como la gran actitud del cuarteto, en general.
Temas como You´re Gone, Overload, Kind of Love, o Even More o Coackroach, no hicieron que el escaso público despegara los pies del suelo, pero sí que se llevaran una gran ovación. Personalmente, creo que es un joven grupo con algunas buenas canciones y que todavía tienen mucho que aportar a esta nueva “oleada” de grupos stoner-grunge.
A lo largo del concierto de los italianos entró un poco más de público, pero aún así no se superó la media entrada. Allá los que se lo perdieron, porque los que estábamos allí presentes sabíamos que íbamos a ver un buen concierto de House of Broken Promises, como así fue.
Sin mucho tiempo de espera, el trío californiano entraba en escena. Hace unos años, tuve la oportunidad de ver a Cancino y Seay con Unida en un Hellfest; y eso que tocaban a la vez que unos tal Black Sabbath (no os preocupéis que a los Sabbath los iba a ver ese mismo año en el Graspop, de una forma mucho más cómoda… No estoy tan loco…).
El trío californiano se mostró muy cercano al público, sobre todo Mike Cancino, que se dirigía al público en castellano, con un marcado acento chicano.
Los de Indio (California) estaban envueltos en una gira europea para la presentación de su nuevo Ep, “Twisted”, y visitaban tierras gallegas, vascas y asturianas antes de desembarcar en el festival belga Desertfest, donde fueron los encargados de cerrar uno de los tres escenarios una noche.
La incorporación, hace unos años, de Joe Mora en el bajo y en las labores vocales han dotado de mucha más agresividad al grupo respecto a su antecesor, Eddie Plasciencia. Parece que ese cierto aire a Corrosion of Conformity que se daba en ciertas canciones como The Hurt o Blister se ha tornado mucho más agresivo y hard-rockero.
Esas canciones de su primer álbum, “Using The Useless”, no faltaron en el show de la capital galega y junto a otras como Broken Life, Physco Plex, Buried Away o la pegadiza Obey The Snake, fueron de las más aclamadas por un público que, por momentos, parecían más figurantes de la serie walking dead que asistentes a un concierto de rock (les perdonaremos porque seguro que tuvieron un fin de semana de nolopruebismo).
A medida que iba transcurriendo el concierto, la pareja Cancino-Seay acaparaba todas las miradas, no solo por su enorme calidad técnica, si no porque sus gestos, miradas y, sobre todo, actitud encima de un escenario, hacían que no les perdieras de vista ni un segundo.
Ellos dos se marcaron un medley, después del solo de batera de Cancino, en el que interpretaron partes de Back in Black y Paranoid, entre un gran solo de guitarra de Seay.
House of Broken Promises demostraron que les gusta su trabajo, que se lo pasan bien en un escenario y que derrochan actitud allá por donde van; no importándoles si están actuando en The Valley del Hellfest o en una pequeña sala con pocas personas.
Pero no solo tocaron temas viejos… El grupo traía un nuevo EP bajo el brazo, titulado “Twisted”, del que interpretaron temas como The Stroke, Panzaram, Toranado o la propia Twisted.
Gran concierto de los californianos, que nos regalaron el magnífico tema de Unida: Black Woman. Vale que no estaba John García, pero Joe Mora lo defendió con dignidad, dotándolo de esa agresividad ya mencionada.
Esperemos que la próxima vez que vengan por estos lares tengan una mejor acogida por parte del público. Pelletier Horror te recomendó el concierto y no nos equivocamos en absoluto.
Seguro que el año que viene los veremos por tierras galas en cierto festival francés al que tenemos bastante aprecio (Bueno… Vale… Lo adoramos e idolatramos, pero bien merecidamente). Nos hacemos un Valley… Pero, de vez en cuando, trocitos del Valley pasan por Galicia y merece la pena verlos.
Hacedme caso. Palabra de Pelletier.
Stay Pelletier
Texto y fotos: Santi Pelletier (@SantiPelletier)