
De vías que amamantaron a grandes rockeros, de toneladas de asfalto y papeles de periódico engrasados, de cubos ardiendo para dar calor a almas sin medios, pero con sueños… De las calles de Nueva York llega a La Península Willie Nile. .
El viejo rockero rejuvenece en cada escenario, con cada acorde, haciendo de sus bolos algo indescriptible, cargado de emoción y mucho rock and roll.











