
“Hay muchas maneras de ir a un concierto…”

Spiderman a los superhéroes, la guitarra al heavy, la nocilla a los bocadillos, los cuernos a AC/DC, el Resurrection Fest a los festivales y las Route Resurrection a los bolos en salas de mediano/pequeño formato. He dicho!!!

En la historia del Heavy metal ha habido muchos frontman, frontwomen e incluso alguna cosa rara (léase Marilyn Manson), pero solo los más grandes han conseguido que, después de abandonar la banda que les catapultó, el respetable siguiera mimándoles, queriéndoles e idolatrándoles… Entre ellos y durante más de cuarenta años se encuentra Udo Dirkschneider.

Los años pasan, las vidas nos van alejando y acercando a nuestros amigos y conocidos; nuestra música cambia: la que escuchamos, la que bailamos y la que nos gustaría bailar.
Eso mismo debieron pensar Carlos Tarque y Ricardo Ruipérez en sus tiempos, hasta que llegó el momento de un hasta luego; el momento de echar la mirada atrás, hacer balance y plantearse nuevas metas y algún que otro reencuentro.

El frío llega y, como viene siendo habitual, el Hellfest nos lo calma desvelando prácticamente todo su gran cartel, para así seguir reinando sobre los demás festivales de la faz de la tierra.

El año pasado, el anterior e incluso el anterior, Clissôn amanecía nublado (bueno, solo en mi cabeza, ya que la resaca se apoderaba de mí). No lo pruebo Style!!!
Ibuprofeno, omeprazol…, el kit necesario del buen festivalier. Qué os voy a contar que no sepáis…?

Una oscura noche de Octubre, casi tan oscura como nuestras almas; fría, lluviosa , inquietante… Esa era la antesala del bolo que traía a Ben Poole a nuestra siempre amada sala Forum Celticum de O Burgo.

Allá por 1992, justo después de los buenos años 80, un superviviente de esa década, “Fortu” Sánchez (vocalista de Obús), un bajista desconocido hasta ese momento, Niko del Hierro y Jero Ramiro (Ñú, Santa…) a las seis cuerdas, se fundó en Fuenlabrada Saratoga.

En un no parar de buenos bolos, Kivents nos trae al Forum Celticum a una de las Rock ‘n Roll Woman más en forma del panorama actual.

“Al final del verano, la zona de la Ribeira Sacra acoge las miradas de todos los hermanos Pelletier, ya que se inicia la vendimia de la uva que más tarde cataremos en poderosos orujos o en sedosos caldos dignos del Dios Baco y de todos los dichosos invitados a su mesa!!!”